A eso de las 08:00 de este miércoles, el Presidente Gabriel Boric, junto a ministros y alcaldes de la región Metropolitana, anunció la presentación de un proyecto de ley que tendrá como objetivo limitar los funerales de alto riesgo, conocidos como “narcofunerales” o “funerales narco”. La misma iniciativa tendrá como objetivo implementar la demolición de los “narco mausoleos”. Todo, a fin de “combatir la cultura narco y todos los ilícitos asociados, para así recuperar los espacios públicos tomados por estos grupos y dar tranquilidad a la ciudadanía”, de acuerdo a un comunicado emanado desde el Ejecutivo.
Fue el propio Presidente Boric quien explicó el proyecto: “Se acota el plazo para realizar los llamados ‘funerales narco’, para su realización en no más de 24 horas, y se establece que solo podrá realizarse en las instalaciones del cementerio o crematorio donde será sepultada la persona que haya fallecido”.“Esta ley impone penas más gravosas a quienes cometan determinados delitos en el contexto de un funeral de este tipo: quienes interrumpan u obstaculicen la circulación en la vía pública; quienes saqueen un local comercial; quienes participen en riñas o porten armas y hagan uso de armas de fuego o fuegos artificiales, van a tener que responder a esos actos, ateniéndose a esta nueva normativa”, complementó el Mandatario.
A ello se suma que se “restringe la cantidad de personas que podrán asistir” a la ceremonia.
Quien determinará la calidad y peligrosidad de la ceremonia mortuoria será el delegado presidencial regional, sobre un informe de Carabineros. Entre los factores que se considerarán están los antecedentes delictuales del fallecido, su relación con bandas criminales y cantidad de familiares directos con registros delictivos.
El alcalde Maximiliano Rivas, de Lo Prado, valoró la propuesta: “(Es) un avance muy importante que sigue la senda de las confianzas de la ciudadanía para poder superar estos momentos de inseguridad”.“Nadie se explica por qué hay tantas libertades para estas actividades que le hace mucho daño a los barrios”, añadió luego el edil, destacando que con esta medida se espera “no más fuegos artificiales, amenazas ni disparos, particularmente cuando fallece una persona“: “Es una medida muy importante que viene a dar tranquilidad a los barrios”.
