Con su voz áspera y unos movimientos frenéticos sobre el escenario, Tina Turner conquistó al público de medio mundo, convirtiéndose en una de las estrellas inolvidables de los años 80 y 90.
Turner, bautizada como la “reina del rock and roll”, falleció este miércoles a los 83 años.
La cantante de origen estadounidense murió “tras una larga enfermedad“ en su casa de Kusnacht, cerca de Zúrich, Suiza.
“Con ella, el mundo pierde una leyenda de la música y un ejemplo a seguir“, dijo en un comunicado su agente.Turner había sufrido una serie de problemas de salud, incluidos un cáncer, un derrame cerebral e insuficiencia renal.
La artista saltó a la fama junto a su esposo Ike Turner en la década de 1960 con canciones como Proud Mary y River Deep, Mountain High.
En 1978 se divorció de Ike, quien durante años abusó de ella física y psicológicamente, y logró un éxito aún mayor como solista en las décadas de los 80 y 90.
La cantante era famosa por la energía que desprendía sobre el escenario y su voz ronca y poderosa.
Ganó 8 premios Grammy y entró en el Salón de la Fama del Rock ‘n’ Roll en 2021 como solista, habiendo sido incluida por primera vez junto a Ike en 1991.
Su vida con Ike
Nacida en el pequeño pueblo de Nutbush, en Tennessee, el 26 de noviembre de 1939 con el nombre de Anna Mae Bullock, tuvo una infancia difícil, marcada por la separación de sus padres y la estricta educación religiosa que recibió de sus abuelos.
Empezó a cantar en una iglesia bautista y, tras graduarse en la secundaria, se puso a trabajar en un hospital con la intención de hacerse enfermera. Una visita a un club nocturno en el que tocaba el que sería su futuro marido le cambió la vida para siempre.
Primero encontró la fama siendo una de las coristas de la banda de Ike Turner, The Kings of Rhythm.
Pronto se puso al frente del grupo, y la pareja lanzó temas como Fool in Love o It’s Gonna Work Out Fine, que entraron en las listas musicales estadounidenses a principios de los 60.
Sus otros éxitos incluyen temas como Nutbush City Limits, de 1973, que trata sobre el pequeño pueblo en el que nació.
En todos esos años, el abuso físico y emocional al que la sometió Ike le estaba pasando factura.
Fue él quien cambió su nombre de nacimiento por el de Tina Turner, una decisión que tomó sin su conocimiento, un ejemplo de su comportamiento controlador.
En sus memorias de 2018, My Love Story, la cantante recordaba el trauma que sufrió a lo largo de su relación.
En el libro comparaba el sexo con su marido con “una especie de violación”.
“Usó mi nariz como saco de boxeo tantas veces que podía sentir el sabor de la sangre corriendo por mi garganta cuando cantaba”, escribió.
En 1978, después de una serie de éxitos que incluyeron River Deep, Mountain High, Tina decidió que se sentía capaz de dejar Ike. Ya no podía soportar la “tortura” de estar casada con él y el impacto que tuvo en sus cuatro hijos.
“Estaba viviendo una vida de muerte. No existía”, dijo. “Pero sobreviví. Y cuando salí, caminé. Y no miré hacia atrás”.
Tina se mudó y tuvo que rehacer su carrera. Ganó dinero cantando en Las Vegas y haciendo apariciones en varios programas de televisión.
Hasta que en 1981 decidió contar la relación de abuso que sufrió en una entrevista en televisión. Y esto fue un hito, porque en los 80 aún no había ni tanta información sobre el tema ni gente relevante que hablara sobre ello.
Su caso sirvió para visiblizar que “la violencia doméstica estaba en todas partes”, cuenta a la BBC la doctora Lenore E. Walker, directora del Instituto de Violencia Doméstica con sede en EE. UU.
Después de eso, reconstruyó su carrera y y se convirtió en una de las mayores estrellas del pop y el rock de los años 80 y 90, con éxitos como Let’s Stay Together, Steamy Windows, Private Dancer, I Don’t Wanna Fight y It Takes Two.
También protagonizó la película de 1985 Mad Max Beyond Thunderdome, en la que aparecía otro de sus éxitos, We don’t need another hero; y la ópera rock de 1975 Tommy.
Un segundo matrimonio feliz
Encontró la felicidad con su segundo marido, el ejecutivo musical alemán Erwin Bach.
Comenzaron a salir a mediados de los 80 y se casaron en 2013.
La pareja vivía en Suiza y Turner adoptó la ciudadanía de ese país, renunciando a la estadounidense.
Bach le donó uno de sus riñones en 2017 después de que se descubriera que sufría insuficiencia renal.
También sufrió en 2018 la pérdida de su hijo mayor, Craig, por suicidio. Su padre era el excompañero de banda de Ike Turner, Raymond Hill.
Otro de sus hijos, Ronnie, cuyo padre era Ike Turner, murió en 2022. También tuvo dos hijos adoptivos, Ike Jr y Michael, hijos de Ike de una relación anterior.
La historia de la vida de Tina Turner fue llevada a la gran pantalla en 1993 en el filme What’s Love Got To Do With It, que le valió a la actriz Angela Bassett una nominación al Oscar.
En 2018 se estrenó en Londres un musical sobre la vida de la cantante, que luego llegaría a Nueva York y otras ciudades del mundo.
En una entrevista en 2018, Turner dijo: “La gente piensa que mi vida ha sido dura, pero creo que ha sido un viaje maravilloso. Cuanto más envejeces, más te das cuenta de que no es lo que te pasa, sino cómo lidias con ello”.